Los cumpleaños olvidados
Me he dado cuenta hace un momento. Este año no me he acordado de celebrar el segundo aniversario de Jass it up, boys! Por tanto, tampoco me he acordado de enumerar todas las razones por las que este blog ha hecho mi vida un poco mejor. Roberto, José Miguel, Manolo, Aarón, la gente de San Javier, Inperson (¿dónde te has metido?), mis chicos de la Bourbon Street, Eluryan, Millas, un ascensorista, alguien en el disparadero, un pez espada, un franético mirón... Y por supuesto, El Hombre. Todos, cada uno a vuestra manera, habéis construido una fortaleza de arena en la orilla de la playa sobre la que descansa mi imaginación. Gracias por todo. Los fumadores solemos decir que no recordamos qué hacíamos con las manos cuando aún no sujetábamos un cigarrillo entre los dedos. Tampoco yo sé qué hacía con mis días cuando vosotros no formábais parte de ella.
Sin embargo, el sábado olvidé que ya iban dos años de fantasear sobre el jazz en esta tímida pantalla de ordenador. Puedo poner muchas excusas. Un nuevo trabajo que empieza en una universidad (¡mañana! y tengo miedo). Una importantísima reunión en clave de jazz de la que espero poder hablar en unos meses (o antes). El último año del Máster. La recién estrenada afición por el Matusalén. La tesina que ya está para defenderse en un tribunal de señores con toga. El Hombre, su líbido y la mía. Mi mejor amiga que se me casa (parece que fue ayer cuando jugábamos a romper el cielo a pedradas)...
En cualquier caso, juntaré la celebración de Jass it up, boys! con la de mi cumpleaños (que ya llevo demasiados años sin celebrarlo por tristeza, vergüenza y demás gilipolleces). Vayan desempolvando sus zapatos de gamuza azul. Yo pongo la música y el vestido de piqué.
Sin embargo, el sábado olvidé que ya iban dos años de fantasear sobre el jazz en esta tímida pantalla de ordenador. Puedo poner muchas excusas. Un nuevo trabajo que empieza en una universidad (¡mañana! y tengo miedo). Una importantísima reunión en clave de jazz de la que espero poder hablar en unos meses (o antes). El último año del Máster. La recién estrenada afición por el Matusalén. La tesina que ya está para defenderse en un tribunal de señores con toga. El Hombre, su líbido y la mía. Mi mejor amiga que se me casa (parece que fue ayer cuando jugábamos a romper el cielo a pedradas)...
En cualquier caso, juntaré la celebración de Jass it up, boys! con la de mi cumpleaños (que ya llevo demasiados años sin celebrarlo por tristeza, vergüenza y demás gilipolleces). Vayan desempolvando sus zapatos de gamuza azul. Yo pongo la música y el vestido de piqué.
Comentarios
Besos, un año más.
Besazos alcorconeros
Aunque yo no lleve dos años leyendote, es uno de los mejores Blog que jamás he visto y por eso y mucho más, te deseo lo mejor junto a el.
Besos desde este mundillo virtual...
Bern
Besazos y achuchones,
Rafa
Nalyd: tú me dibujas a mí medias lunas en la espalda
José Miguel: gracias, pequeño. Besos de los nuestros
Eluryan: GRACIAS; GUAPA
Bern: gracias guapetón. Besotes
Rafa: Gracias (por duplicado) y besos (por multiplicado)
Para ti: decirte que la felicidad es un peldaños que se sube y que tiene encima otro con más felicidad y que, eso, que me alegro.