Del Festival de Jazz de Madrid y otros enfados
En la vida hay ocasiones en las que una tiene que aprovecharse de los papeles que fue almacenando en su curriculum vitae. Quizá no le sirvieron de mucho, ni le enseñaron demasiado al margen de lo que, por cuenta propia, fue sumando a su cabeza. Pero, de tanto en cuando, una coge un teléfono y dice: “Hola, mi nombre es Olvido, dirijo tal revista y necesito información acerca de…”
Hoy ha sido uno de esos días. En Madrid, aunque casi nadie lo sabe porque no se publicitan nunca, existe un Festival de Jazz. Entre el 2 y el 30 de noviembre se celebra la XXII Edición y, aunque Google suele ser una buena fuente documental – según me dijo una vez un jefe un poco más ineficaz que tonto – no recogía mucho acerca de tal evento. En una página recogían un número de teléfono donde comprar entradas y abonos, pero el teleoperador de turno (con todos mis respetos a los teleoperadores, pues yo misma he trabajado en atención telefónica durante mi época universitaria) me dijo que no tenían constancia.
Así que una resopla, para no estallar en un grito que aúne enfado e impotencia. Y, al poco tiempo, como si de un cartoon se tratara, se enciende la bombillita y suena un “clin”. Después de este sonido y esta bombilla, coger el teléfono, buscar el número del Centro Cultural de la Villa (lugar al que remite Google) y hablar con Prensa es todo cuestión de segundos.
Aunque pueda sonar a broma de mal gusto, (muchos preferirán llamarlo "incompetencia" y es que, aunque nos joda, en España tenemos una forma muy peculiar de trabajar) a día de hoy (falta apenas un mes para el festival) no tienen un programa cerrado. Sí saben que va a haber un ciclo de “cine y jazz”, lo que hace que empiece a contar los días con esa ansiedad nerviosa casi infantil. La misma intranquilidad de una primera cita, la misma de un viaje próximo, de un concierto que esperas con impaciencia… También saben, o creen saber, que vendrá Chick Corea. Corea puede gustar más o menos, pero su importancia en el libro de la historia del jazz es innegable.
Hoy ha sido uno de esos días. En Madrid, aunque casi nadie lo sabe porque no se publicitan nunca, existe un Festival de Jazz. Entre el 2 y el 30 de noviembre se celebra la XXII Edición y, aunque Google suele ser una buena fuente documental – según me dijo una vez un jefe un poco más ineficaz que tonto – no recogía mucho acerca de tal evento. En una página recogían un número de teléfono donde comprar entradas y abonos, pero el teleoperador de turno (con todos mis respetos a los teleoperadores, pues yo misma he trabajado en atención telefónica durante mi época universitaria) me dijo que no tenían constancia.
Así que una resopla, para no estallar en un grito que aúne enfado e impotencia. Y, al poco tiempo, como si de un cartoon se tratara, se enciende la bombillita y suena un “clin”. Después de este sonido y esta bombilla, coger el teléfono, buscar el número del Centro Cultural de la Villa (lugar al que remite Google) y hablar con Prensa es todo cuestión de segundos.
Aunque pueda sonar a broma de mal gusto, (muchos preferirán llamarlo "incompetencia" y es que, aunque nos joda, en España tenemos una forma muy peculiar de trabajar) a día de hoy (falta apenas un mes para el festival) no tienen un programa cerrado. Sí saben que va a haber un ciclo de “cine y jazz”, lo que hace que empiece a contar los días con esa ansiedad nerviosa casi infantil. La misma intranquilidad de una primera cita, la misma de un viaje próximo, de un concierto que esperas con impaciencia… También saben, o creen saber, que vendrá Chick Corea. Corea puede gustar más o menos, pero su importancia en el libro de la historia del jazz es innegable.
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Chick Corea & Touchstone estuvieron este verano en Vitoria
No me han podido decir nada más, pero me han prometido enviarme toda la información (y puede que algún Abono – a veces una tiene que aprovechar su faceta laboral – para que cubra el Festival)
De este modo, el enfado unido a la impotencia ha ido evolucionando, a lo largo del día y de las llamadas telefónicas, hacia una ansiedad alegre. Poco más me queda por decir, salvo que publicaré el programa del XXII Festival de Jazz de Madrid en cuanto esté confirmado.
Comentarios
Gracias por tu visita a mi blog y felicidades por el tuyo
Estoy de acuerdo contigo, esto del festival de Jazz en Madrid es lamentable, que haya que acudir a las páginas oficiales de los artistas para saber cuando tocan es penoso...
Gracias por visitar la página, si tú tienes una, estaré encantada de acudir a ella.
Un saludo
Me ha gustado mucho tu blog, a partir de ahora considérame un habitual. Como comentaba ranse la cultura es el pariente pobre, y dentro de la cultura el jazz es el indigente (al menos en España), blogs como el tuyo son mas que necesarios...
¡ánimo!
Mientras suene una nota del pariente indigente, habrá que seguir "on the road" - que escribiera Kerouac.
Un abrazo
Dave Holland Quintet día 3
Maria schneider Orchestra el día 15
Sé que suena a coña, pero es así...
Yo quiero comprarme un abono, pero con el paso que llevamos, lo sacarán a la venta el día de antes. Los festivales, los de verdad digo, se cierran con antelación precisamente para que la gente haga sus huecos en la agenda, sus previsiones monetarias,... En resumen, que en vez de llenarme la calle de obreros y excavadoras (que vivo en todo el meollo) podrían invertir un poquito en un gabinete de prensa adecuado. O, al menos, plantearse si los funcionarios contratados están haciendo su trabajo o jugando a los crucigramas chinos estos que les tienen consumido el seso a los sinseso. En fin, que estoy cabreada.
Pero gracias por los datos que vas poniendo.